El repartidor

Siempre que tengo la oportunidad de poder pasear por la ciudad mientras trabajo lo hago. Tengo un trabajo que consta de buenas condiciones y que me resulta muy placentero hacer. Ser repartidor de comidas es un trabajo que para mi gusto es de lo más tranquilo que haya. Mientras uno debe llevar comidas puede disfrutar no estar encerrado en una oficina y poder conocer y disfrutar un poco mas de este bella ciudad. claro esta que a veces se hace duro trabajar los sábados o viernes a la noche mientras uno piensa que le gustaría estar en casa disfrutando . Pero no lo cambiaría por trabajar toda la semana dentro de un pequeño cubículo en una oficina. En este momento me encuentro en un delivery en Recoleta que esta demás decir que es un barrio muy bello y lleno de historia para conocer. Otra cosa que es realmente agradable de este trabajo, es la relación que uno puede entablar con l agente. Me agrada quedarme charlando aunque sea unos escasos minutos con los clientes a ver si están satisfechos con la comida y con el servicio que se les está brindando. Creo que la gente podría optar por no pedir la comida a domicilio e ir al local, pero cada vez la gente está más decidida a comer en la comodidad de su hogar. Y siempre y cuando uno le brinda las mismas comodidades que a los cliente que van al restaurant, no tienen por qué cambiar de opinión. Este es un tipo de consumo que ha crecido exponencialmente a lo largo de los últimos 3 o 4 años y creo que lo seguir haciendo. o por lo menos lo espero porque es un trabajo del que realmente se puede disfrutar haciéndolo sin tener que estar atado a un pequeño cubículo en una oficina.